¿Qué está pasando en el jardín Orozco?
Durante los meses de febrero y marzo muchas personas que visitan la Universidad de Costa Rica han observado con curiosidad sobre los trabajos que se realizan en el Jardín Botánico José María Orozco. Algunas personas han visto por primera vez lo que había detrás de esas enormes macollas de bambú que escondían el jardín. Varias personas se han preocupado por las plantas del jardín y por las mismas plantas de bambú que se podaron. Todas esas preocupaciones son esperadas si se tiene cariño por las plantas y la naturaleza.
Los trabajos del jardín obedecen a la misma necesidad que tenemos por cuidar el jardín. El año pasado, debido a la cercanía que tiene el bambú con el tendido eléctrico, hubo dos inicios de incendio que tuvieron que ser atendidos por el departamento de bomberos de Goicoechea. Afortunadamente, la atención por los bomberos fue rápida y además los eventos ocurrieron en época lluvioso, de no ser así, los incendios pudieron ocasionar un incidente mayor que aún estaríamos lamentando.
Además de prevenir otros incidentes similares, la poda del bambú se había planeado como parte del nuevo plan de manejo del jardín realizado en conjunto con la Red de Areas Protegidas. El bambú había crecido tanto por tantos años que no dejaba crecer nada debajo de su sombra, mucha de la cual la producía la materia orgánica muerta acumulada entre las cañas. Junto a la poda del bambú se aprovechó el trabajo para sacar materia orgánica muerta acumulada por muchos años y que ponía en peligro al mismo jardín por servir como combustible en un eventual incendio y que además ponía en peligro las edificaciones vecinas. Con excepción de una de las macollas de bambú que estaba muy dañada por los incendios, las macollas no se podaron del todo y retoñarán una vez que inicien las lluvias.
Para esta poda preventiva y de manejo fue necesario la coordinación entre la Vicerrectoría de Administración, la Oficina de Servicios Generales, la Vicerrectoría de Accion Social, la Vicerrectoría de Vida Estudiantil y la Escuela de Biología. En el trabajo estuvieron involucrados más de diez funcionarios universitarios de la sección de zonas verdes, que con mucho profesionalismo evitaron accidentes laborales y con los transeútes, en una labor que requería un cuidado minucioso debido a la cercanía del tendido eléctrico y a lo alto de las cañas que se podaron. En la limpieza del jardín también han estado involucrados estudiantes del Programa de Voluntariado de la Vicerrectoría de Vida Estudiantil, que además han trabajado en otras actividades relacionadas a los futuros proyectos del jardín como la producción de especies forestales, el compostaje de materia orgánica muerta, la dispersión de semillas de plantas nativas y la preparación de huertos urbanos.
Aunque los trabajos realizados dejan un espacio abierto sin vegetación que a primera vista luce triste, estos eran necesarios para que al jardín entre más energía con la luz del sol. Esta energía, que aporta el sol, más el gran entusiasmo que han demostrado las personas participantes del voluntariado y su gran trabajo permitirá a otras plantas crecer y el desarrollo de los nuevos proyectos del jardín. Esta energía permitirá que podamos tener el jardín en buen estado durante mucho tiempo.
Si usted tiene interés en participar en las actividaes del jardín y en su cuido comuníquese con nosotros. En este sitio web del jardín podrá encontrar los contactos.
